Hola amigas.
Como cada día al abrir los ojos encontraba en su habitación las mismas cosas, puestas en el mismo lugar, con ese orden que le caracterizaba, sabía perfectamente si alguien había tocado algún reloj, si el cuadro estaba torcido, cualquier diferencia la notaba enseguida, eso le hacia perder la paz, todo tenía que estar perfectamente ordenado e equilibrado.
Como de costumbre, casi sin tener que pensar, se dirigía a la cocina sin hablar siquiera, se preparaba un café en la misma taza que guardaba durante años, la abrazaba con las manos mientras observaba el mismo paisaje por la ventana.
Sus días eran pura monotonía, reflejo de cuanto había vivido, de cuanto había aprendido a lo largo de años de quietud y desidia.
Aquel día no despertó igual, su cara era distinta, esbozaba una sonrisa pícara, un gesto de felicidad, mezcla de culpa y liberación.
Sus sueños la habían cambiado, nadie sabía nada, todos cuantos la rodeaban estaban expectantes, no había mirado el desorden de su mesa, se había puesto en pie de un salto en la cama y con una canción en sus labios, esa que tarareaba sin cesar mientras sacaba de los cajones ,para ir dejando esparcidos por la habitación, todos los fulares de colores que tenía. Olvidó ponerse las zapatillas y correteaba descalza por la casa, ese café de la mañana no fue pausado sino tomado como un baile de salón de una estancia a otra.
Eligió el vestido estampado con los colores de la ilusión, los zapatos más originales de los que disponía y se dió una larga ducha sin dejar de cantar y bailar.
A veces nos despertamos de un modo diferente, a veces un simple sueño nos hace ver lo importante de la vida, a veces la vida es el desorden, un día podemos descubrir sin más que lo importante es la actitud mas que las formas, que lo verdaderamente maravilloso es despertar con ilusión y ganas de comernos el mundo y que poco importa el movimiento de un cuadro ya que solo se mueve si lo rozamos y solo lo rozamos si nos movemos y lo miramos de cerca.
A veces nos despertamos y sacamos lo mejor que tenemos dentro de ese armario para vivirlo, no para tenerlo colocado por colores y modelos, es mejor tenerlo por el suelo y ver cuan importante es rozar la piel con las texturas que limpiarlo para que no tenga pelusas.
Despertemos y vivamos nuestros sueños sin miedo al fracaso a las criticas, dejemos de hacer lo que los demás esperan de nosotros. Ellos se acostumbran a ver lo que nosotros hacemos cada día tomando ese café y mirando por la ventana.
Tomemos ese café bailando de puntillas y derramando algún sorbo.
El look de hoy es un cuadro torcido en una habitación llena de colores. esta chaqueta militar de esas que esta temporada no encontré ninguna que me gustase hasta que vi esta claro!!
Con un corte clásico, unos colores diferentes, que igual puedes llevar con un jeans o con una falda o vestido como la llevo hoy, los tonos son bastante fáciles de combinar, ese rojo, negro y gris son perfectos para ello.
La falda es atrevida y sencilla y la camisa de inspiración Parisina al igual que la boina que es de allí literalmente. cuanto me gusta esa ciudad!!
Unas botas mosqueteras para correr y alejarnos del frió que estamos sufriendo y nada mas amigas a disfrutar de todo cuanto la vida nos ofrece.
Chaqueta: Pepa Pozo Córdoba
Camisa: Classy Privee, Alicante
Falda: Gallery 13
Botas: Italia
Gafas: Rayban
Bolso: Massimo Dutti saldes